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Los cerdos engordan en torno al 40% de su peso final en dicha fase de montanera (reponen aproximadamente 60 kilos de peso vivo. Cerdos de la raza entrepelado del valle del guadiato de raza 100% ibérica sin cruces, que se sueltan a dehesa con 60 días de vida. Recorren diariamente grandes distancias como unos verdaderos atletas lo que los mantiene sanos, se sacrifican a los 24  meses de edad, 10 meses por encima de lo que exige la norma para el jamón de bellota. Todo ello se transfiere en el producto final. Buena alimentación, actividad física , un sacrificio a mayor edad y el buen control y manipulación de la materia prima por parte de la empresa , para garantizar un producto de calidad excepcional.  La elaboración y curación de sus productos ibéricos está supervisada minuciosamente por técnicos cualificados controlando la ventilación, temperatura y humedad. En bodegas naturales la curación de sus productos se lleva de manera lenta, llegando a alcanzar los jamones su punto óptimo de curación trascurridos hasta los 4 años según pesos de las piezas. Solo con esta paciente espera se consigue el resultado en aroma, sabor y textura de un excelente ibérico.